jueves, 20 de agosto de 2009

Mineria y Conflictos Sociales




Por Gonzalo Valderrama Escalante
Instituto de Investigaciones Sociales Amaru Teqse


Para entender el incremento del número de conflictos sociales ligados a la actividad minera en nuestro país es necesario tener una perspectiva histórica del tema, los problemas de hoy son en el fondo los mismos de los últimos siglos de nuestra historia republicana y colonial.

El Perú un país minero

José Baquíjano y Carrillo, reconocido como uno de los precursores de la independencia nacional al haber integrado el círculo de estudiosos “amantes del país”, considerado uno de los primeros economistas peruanos, publicó en 1791 en el Mercurio Peruano una serie de artículos a fin de demostrar que el Perú debía avocarse fundamentalmente a la explotación de sus recursos naturales, además sostenía que el libre comercio era la alternativa de la modernidad y no el causante de los problemas económicos de la época. Para Baquíjano la agreste geografía del Perú no permitiría un desarrollo adecuado de la agricultura, mucho menos de la industria, por ello, a fin de forjar una nación próspera sugería que "las provincias del Perú han de buscar las riquezas en el seno, y no en la superficie de sus tierras. Todas las que puede producir el reino mineral se hallan en abundancia en su distrito: el alumbre, alcaparrosa y almagre, el cristal, imán y azufre, el Copé, especie de nafta negra y dura como el asfalto, el cobre, plomo y fierro y, sobre todo, el oro y plata, instrumento general de ecuación en toda especie de comercio". (José Baquíjano y Carrillo. “Disertación Histórica y Política sobre el Comercio del Perú”, Mercurio Peruano, Tomo I, números 23-31. (1791) Citado en: Humberto Campodónico, “Baquíjano, país minero y libre mercado”. 2008.)

Al centrarse en una explotación primaria de los recursos naturales del subsuelo, este discurso sobre el cómo lograr la prosperidad nacional dejaba de lado la principal fuente de trabajo del grueso de la población peruana en dicha época: la agricultura y la ganadería. Hoy por hoy el discurso sobre cómo vencer en la lucha contra la pobreza, promovido por los últimos cuatro gobiernos, hace énfasis en el aprovechamiento de los minerales, gas natural y petróleo del subsuelo, el libre mercado aparece como el mecanismo de regulación económica que indefectiblemente conduce a la riqueza de las naciones. Y la agricultura y ganadería, actividades económicas que ocupan el mayor porcentaje de la población económicamente activa a nivel nacional, quedan relegadas a un muy segundo plano en el accionar del gobierno central y de los gobiernos locales.

El agravante de esta situación es el contexto en el que se da la problemática del uso adecuado de los recursos naturales: el calentamiento global, un inminente estrés hídrico en los andes, unido a un discurso ecologista que a nivel mundial llama la atención sobre los efectos dañinos cada vez más evidentes que la actividad industrial de los últimos siglos han ocasionado a escala planetaria. Nuestro país como bien es sabido es uno de los países con mayor biodiversidad en el mundo, y también uno de los mas susceptibles al cambio climático. Esta realidad, donde problemas locales y problemas globales son inherentes es también bien conocida por la población que desde distintas partes del país cuestiona la proliferación de las industrias extractivas.

El perro del hortelano y la propiedad del subsuelo

Si este viejo discurso promovido desde el estado es tan criticado, ¿cuales son entonces las propuestas de la población que protagoniza los conflictos socioambientales? Dada la complejidad del tema y por motivos de espacio nos centraremos en uno de los aspectos fundamentales de la discusión: La propiedad del subsuelo, ahí donde se encuentran las riquezas mineras, petroleras y gasíferas del país: Entonces, las razones de fondo que ocasionan los conflictos entre poblaciones campesinas - nativas, empresas mineras y estado son una combinación de un inadecuado marco legal sobre la propiedad del subsuelo que vulnera los derechos de la población bajo cuyas tierras se encuentran estos recursos, y mecanismos ineficientes de redistribución de la riqueza generada por el sector minero energético, que hace de las poblaciones afectadas por esta actividad "victimas del desarrollo". Las comunidades campesinas y nativas no reclaman al Estado solamente la consulta y el respeto a su territorio y medio ambiente, sino que “el reclamo de las comunidades campesinas incluye la posibilidad de ejercer el derecho de propiedad sobre los recursos mineros que se encuentran bajo sus tierras y poder decidir las condiciones de explotación de estos recursos”. (Pedro Castillo Castañeda, ¿Qué sabemos de las Comunidades Campesinas? Pág. 85, 2007)

La legislación minera vigente ha expropiado el subsuelo a los comuneros y pobladores nativos, que a pesar de ser propietarios del territorio donde se encuentran los principales yacimientos mineros y energéticos del país, deben contentarse con observar el enriquecimiento de las empresas extranjeras que explotan sus recursos. Esta expropiación es la que provoca indignación y resentimiento, materia prima de la conflictividad socio ambiental. Hay un principio del derecho universal que rige desde tiempo de los romanos, según el cual el dueño del suelo extiende su dominio por lo cielos y el subsuelo hasta el límite de su conveniencia y del derecho ajeno. Este principio es ignorado por los arreglos en la legislación actual sobre la propiedad de los recursos naturales, la cual como veremos, es un rezago de los tiempos coloniales, al igual que el discurso de Baquijano y Carrillo apropiado hoy por los gobiernos de turno.

Según el Artículo 66° de la Constitución de 1993, “Los recursos naturales, renovables y no renovables, son patrimonio de la Nación. El Estado es soberano en su aprovechamiento. Por ley orgánica se fijan las condiciones de su utilización y de su otorgamiento a particulares. La concesión le otorga a su titular un derecho real, sujeto a dicha norma legal.”. Esta idea de expropiar el subsuelo en caso este contenga riquezas proviene del Derecho Indiano, la legislación que se aplicó a las Indias en tiempos de la colonia. En las ordenanzas del Virrey Toledo, en 1574, encontramos una referida a este punto: “Por cuanto todos los minerales son propios de Su Majestad y derechos realengos por leyes y costumbres, y así los da y concede a los vasallos y súbditos donde quiera que los descubriese y hallaren, para que sean ricos y aprovechados, dándoles leyes y ordenanzas, para que gocen de ellos y los labren, de manera que cesen los pleitos y diferencias, y a todos quepa parte, acudiendo a sus reales cajas con lo que como a Rey y señor natural se le debe”. (Cita en: Handersson Bady Casafranca Valencia* “La propiedad de los recursos naturales en los territorios de pueblos indigenas perú: la pobreza de los ricos territorios indígenas y recursos naturales”.
*Asesor y consultor de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas – CAOI (Ecuador, Colombia, Chile, Argentina, Bolivia y Perú); Ex Asesor Legal de la AIDESEP.)


La vuelta de este mundo de cabeza

Phelipe Huaman Poma de Ayala describe al orden social surgido de la colonia y del sojuzgamiento de las poblaciones nativas del ande ante intereses de ultramar como el mundo al revés, ese orden social poco ha cambiado en la republica, una muestra de ello es como el tema de los conflictos mineros tiene sus explicaciones en cuestiones históricas. Ante ello, ¿que significaría una real solución a esta problemática? En primer lugar, un cambio de sistema en la propiedad de los recursos naturales, este cambio de sistema permitiría a las comunidades campesinas y nativas ser dueñas de lo que les pertenece desde tiempos prehispánicos, manejar así sus propios y cuantiosos recursos. Las implicancias de este cambio en la propiedad del subsuelo serian enormes, implicaría que la mayoría de la población nacional, de ascendencia campesina e indígena, tuviese de pronto control sobre las grandes sumas de dinero que la industria extractiva genera. El mapa de poder (económico, político, y hasta simbólico) en el país se reconfiguraría, significaría que la tortilla se vuelta, probablemente un pachakuti.

martes, 9 de junio de 2009

La Amazonia Rebelde



LA AMAZONÍA REBELDE
Acerca de las últimas protestas y lo que se juega en la selva peruana

Anahí Durand Guevara

Al surcar el Marañon y adentrarse en territorio awajum, es imposible no sobrecogerse por la magnificencia de la selva, el ancho de sus ríos y la dignidad de miles de hombres y mujeres empeñados en mantener su identidad desafiando siglos de exclusión y miseria. Pueblos como Bagua, Imaza, Urakusa o Santa María de Nieva podrían describirse como “zonas de frontera” -en el sentido amplio del término como la geografía donde empieza a delinearse el territorio del estado nación- cuyos habitantes originarios han logrado hacer valer su condición de ciudadanos en base a un largo proceso de organización y a constantes luchas por el respeto a su identidad. Es por ello que el último paro amazónico no puede considerarse un hecho excepcional; se inscribe en la larga duración de protestas nativas y campesinas que hoy se enfrentan directamente al modelo neoliberal. Se trata de un asunto que nos compete a todos en tanto se juega el futuro de nuestros recursos naturales, la dignidad de nuestros compatriotas amazónicos y la imposición de la violencia como salida a los conflictos, sustentada en un discurso autoritario que mella más aun nuestra frágil democracia. Temas importantes que merecen ser reflexionados y discutidos, aquí algunas ideas.

Las últimas protestas amazónicas

El 8 de junio del 2008 el Ejecutivo promulgó una serie de Decretos Legislativos, en el marco de las facultades entregadas por el Congreso para legislar temas referidos a la aplicación del TLC con los Estados Unidos. No obstante que según la Constitución estos decretos debían limitarse a este tema específico, varios de ellos referían a la concesión y explotación de los recursos mineros, forestales y de hidrocarburos en la Amazonía. Este hecho provocó la indignación de los pueblos originarios agrupados en AIDESEP, desarrollando entre agosto y setiembre del 2008 un paro en toda la selva. En aquella ocasión, dado lo aberrante del caso (tal como lo demuestran las demandas de inconstitucionalidad presentadas por la Defensoria), el Congreso derogó el DL 1015, otros decretos como el 1073 o el 1064 no fueron derogados comprometiéndose el Congreso a evaluarlos en la brevedad posible: tomando en cuenta este acuerdo los nativos suspendieron las protestas. Pero una vez más se aplicó la política de la mecedora; por más cartas que los indígenas enviaron al Legislativo recordándole su compromiso no se dio ningún paso. El 9 de abril del 2009 se reiniciaron las protestas en la Amazonía; fueron 57 días de tomas de carreteras, movilizaciones y conversaciones entre la dirigencia indígena y el primer ministro. Pese a esto el Congreso siguió dilatando la discusión de los decretos cuestionados y el ejecutivo continuó desprestigiando al movimiento. La huelga continúo hasta que el viernes 5 de junio se decidió “imponer autoridad” desatando una masacre en Bagua que dejó como saldo aproximado 55 muertos (33 nativos y 22 policías) y cientos de heridos...una cifra catastrófica que no se veía desde los tiempos de la guerra contra subversiva.

Esta breve cronología indica que el conflicto no era nuevo, por el contrario se trataba de una demanda legalmente sustentada que llevaba casi un año gestándose y aceptando diversos niveles de conversación con el Estado. ¿Por qué se dilató tanto la revisión de estos decretos, por qué no se cumplieron los ofrecimientos? Pues por que el gobierno no tenía en absoluto voluntad política de resolver la situación. Jugando al desgaste y al descredito de las dirigencias Alan García y sus ministros pretendían dilatar la situación al punto en que pudieran mostrar a los nativos como intransigentes y a la zona en total desgobierno, todo debidamente sazonado por la racista prensa limeña y el clamor de mano dura de la derecha.

Finalmente la represión se desató en Bagua; es importante resaltar la organización de la protesta y la necedad interesada del gobierno. AIDESEP es una organización consolidada, capaz de resistir una protesta larga y muy distinta a otras estructuras coyunturales como los Frentes de Defensa. Hace 30 años que AIDESEP fue fundada y su estructura parte de la representación comunal, articulando apus y jefes nativos de 57 federaciones incluidos el Consejo Aguaruna Huambisa y la Federación Ashaninka. El trabajo de AIDESEP no se ha limitado a la simple reivindicación, han asumido proyectos de desarrollo y han incursionado exitosamente en la representación política existiendo alcaldes indígenas en distritos como Imacita o Condorcanqui. Al margen de los problemas internos y discrepancias que han afectado al gremio, los niveles de cohesión y representatividad son incuestionables y así quedo demostrado durante la huelga. Al gobierno aprista, aferrado al discurso de la manipulación externa (venezolana o boliviana), no le interesó evaluar esto, como tampoco le importó tomar en cuenta que en la zona de conflicto la presencia del Estado ha sido y es básicamente militar. Resulta por ello tragicómico escuchar a los ministros preguntarse quién entregó armas a los nativos, cuando la política estatal durante décadas ha sido armar y entrenar militarmente a la población amazónica, ya sea en Comités de Autodefensa para enfrentar la subversión o como reservistas del ejercito para enfrenta al Ecuador en el caso del Marañon. Por supuesto en ambas oportunidades los nativos eran peruanos como cualquiera y debían poner el pecho por su patria, en esta ocasión cuando los nativos defienden sus derechos son asesinados y cuestionados por utilizar las mismas armas y el mismo entrenamiento que el Estado les proporcionó.

Sobre la profundización del modelo y las resistencias sociales

Dicho esto conviene analizar más allá de la coyuntura y detenernos en la política de neoliberalismo autoritario – con sus dosis de violencia y criminalización- que con vehemencia habitual viene imponiendo Alan García. En las elecciones presidenciales del 2006 el APRA enarboló la bandera “del cambio responsable” una suerte de alternativa socialdemócrata al proyecto de la derecha mucho más moderado que el nacionalismo humalista. No fueron pocos los que se dejaron convencer votando por esta propuesta retóricamente bien presentada, mas aun tomando en cuenta la inexistencia de la izquierda y la improvisación del Partido Nacionalista liderado por Ollanta Humala. Sin embargo, pocos meses después de asumida la presidencia, rápidamente García giró del discurso del cambio responsable a la prédica del “perro del hortelano”, apostando sin ambigüedades por el capital transnacional, la privatización de servicios y empresas, en suma por la profundización del modelo económico neoliberal iniciado durante el gobierno de Fujimori y que tan poco bienestar ha generado en las mayorías.

Con esta prédica, el gobierno puso en la mira la explotación de los recursos naturales, pues pese a tanta supuesta modernización el Perú sigue siendo básicamente exportador de materias primas. La explotación y concesión de la minería y el petróleo por el capital transnacional son los puntos centrales refiriéndose a las “millones de hectáreas ociosas para maderas por que las comunidades no cultivaron ni cultivarán nada, depósitos minerales que no se trabajan, petróleo en el subsuelo desperdiciado” (Gacia; 2007)…Todos los recursos desperdiciados por la ineptitud de los pobres que ocupan estas tierras engañados por la demagogia de políticos. Una mirada absolutamente sesgada pues obviamente el abandono estatal es responsable de que campesinos y pueblos nativos no hayan sido capaces de aprovechar esa riqueza. ¿Cuál es la política de desarrollo agrario para la Amazonía, cuántos créditos se han entregado a las comunidades para proyectos de desarrollo sustentable, que ha propuesto el ministerio del Ambiente? No hay política alguna; los gobiernos han dejado a los pobladores amazónicos de su cuenta y riesgo y hoy bajo el argumento de que los recursos ahí ubicados son de toda la nación se pretende entregar la selva a empresas transnacionales que pagaran un canon irrisorio, deforestarán el bosque, depredarán el territorio y no generarán empleo ni bienestar, deteriorando aún más las condiciones de vida locales. La historia es conocida, ha sucedido ya en pueblos mineros como La Oroya, en Cajamarca y en la misma Amazonia. Pero lejos de debatir modelos de desarrollo alternativos, consultar a las poblaciones locales, dialogar respecto a su propuesta extractiva, el gobierno promulga leyes inconstitucionales, descalifica a los indígenas y desata una represión desmedida.

Lo cierto es que estamos en un punto de expansión del modelo económico donde la imposición autoritaria e incluso violenta pareciera inevitable. No somos un caso nuevo, en Chile hace años que los mapuches son desterrados de sus territorios para la expansión de la industria forestal; contra ellos ha caído todo el peso del Estado pinochetista continuado por la Concertación que ha asesinado y encarcelado a sus dirigentes ante la pasividad de la sociedad chilena. Esto por no hablar de otras demandas que son aplastadas con mayor criminalización como las protestas de los estudiantes secundarios que no modificaron en nada la privatizada educación y sólo endurecieron las penas para los adolescentes. En México la firma del TLC con Estados Unidos dejó desvalido el campo mexicano guardando relación directa con el alzamiento zapatista del EZLN. Más recientemente otras expresiones de protesta social como la de Oaxaca evidenciaron no sólo reclamos economicistas sino un profundo descontento con el modelo económico y fueron duramente reprimidos por el gobierno federal. Con los sucesos del 5 de junio del 2009 García ha dejado claro que seguirá esta línea de imposición violenta y esto puede marcar un momento de inflexión en las formas de politización y resistencia social.

En este punto el panorama se presenta complejo y se hace difícil predecir el curso que en el Perú tomarán las resistencias al neoliberalismo. Lo cierto del lado de la protesta es que pareciera haber quedado atrás la etapa de “resistencia pacífica” heredada del conflicto armado interno donde las movilizaciones debían cuidarse de no responder con violencia la represión estatal. La muerte de 23 policías lo demuestra y más allá de lo lamentable de toda pérdida humana, refleja el grado de indignación de una población agredida y armada – no por traficantes sino por el mismo Estado- De otro lado la fragmentación social continúa; la reacción de la CGTP ha sido tardía y post represión cuando las protestas llevaban meses, mientras otros gremios como la CCP o la CNA e incluso CONACAMI no han cobrado ningún protagonismo. Por su parte, la oposición institucional representada por Humala y el PNP una vez más se ha mostrado inoperante e incapaz de generar iniciativas prontas que enfrenten al gobierno. Sin embargo, ante la represión desatada se han activado prontamente redes de solidaridad internacional con ECUARUNARI del Ecuador o el ACIN de Colombia, y también redes nacionales realizándose marchas y vigilias en varias ciudades del país aunque hayan sido invisibilizadas por los grandes medios de comunicación. Lo mas deseable seria que toda esta ira social pudiera ser capitalizada políticamente por un proyecto de izquierda que articule una propuesta sensata frente a la hegemonía neoliberal compitiendo democráticamente por el poder el 2011. Pero los deseos no siempre se concretan y la intransigente soberbia del gobierno enturbia aun mas el panorama; el trato despectivo a los nativos, la orden de captura a toda su dirigencia, la insistencia de García en una “conspiración extranjera”, los honores a policías y el estado de emergencia en Amazonas no hacen mas que abonar al descontento. Por lo pronto, queda esperar que la movilización social presione para que se abra al paso al diálogo y las demandas amazónicas sean escuchadas evitando volver al viejo péndulo de exclusión y violencia por el que tantas veces nuestra historia ha transitado; una vez mas la tarea esta en nuestras manos.

Entrevista a Plinio Kategori, COMARU, Consejo Matziguenga del Río Urubamba. Machupicchu, Aguas Cakientes

REENCUENTRO DE CULTURAS ANDINO- AMAZONICA EN MACHUPICCHU


Publicado en: Diario “El Sol”, Cusco 5 de junio de 2009

Por: Bertha Bermúdez Zamalloa
bermuzama@hotmail.com


La serie de decretos legislativos emitidos por el gobierno peruano para promover la industria forestal ha causado una situación polémica en los pueblos amazónicos del Perú, la forma inconsulta de esos dispositivos legales ha afectado seriamente la situación socio-cultural de los habitantes selvático, resultando atentatorias a la ancestral propiedad comunal, motivo por el cual en actitud de protesta y rechazo se han emprendido una serie de medidas de fuerza por considerarlas atentatorias a sus intereses sociales.
Ante la masiva reacción del oriente peruano se han sumado otras regiones del país y también los pobladores del valle de la Convención del Cusco, como bien se sabe en el mes de mayo se han producido diversas paralizaciones una de ellas, la mas temida constituyo la llegada a la ciudad inka de Machupicchu en una suerte de “toma”, anunciada para el 27 de mayo, cuando un grupo de doscientos matziguengas y cincuenta agricultores de la zona, arribaron hasta Aguas calientes, haciéndose presentes 9 representantes de las 18 comunidades nativas.
COMARU (Consejo Matziguenga del Río Urubamba) es una de las organizaciones representativas de nativos de la selva cusqueña que busca dialogar, reflexionar para concertar, propuesta que permitiría superar la tensa situación que de un tiempo a esta parte remece al país. La cuasi fugaz presencia de los matziguengas en área del Santuario Histórico de Machupicchu, sin duda alguna marcará un recuerdo inolvidable para los lugareños que actuaron cual cordiales anfitriones, acaso para mitigar el impacto de la visita inesperada o minimizar el posible accionar de esa medida, claro esta que reconocieron la fuerza colectiva demostrada por los matziguengas basada en valores de solidaridad grupal integracionista, como un paréntesis en el incesante movimiento turístico es necesario reflexionar.

Por el contenido de les expresiones vertidas por Plinio Kategari, miembro del COMARU en una entrevista realizada en el espacio educativo cultural “Conociendo Machupicchu” (INC- PAN MAPI) emitido el 28 de mayo en una prestigiosa emisora de la localidad (Son Latina), transcribimos textualmente:


B. B: Este espacio geográfico-cultural denominado Santuario Histórico de Machupicchu es también un Área natural protegida que requiere ser preservada y conservada como ustedes hacen en vuestro territorio.

Plinio Kategari “Es importante hablar de la naturaleza y sus componentes tanto medioambiente y el ser humano, porque justamente nuestros objetivos siempre han sido la armonía de vivir con la naturaleza y la naturaleza es vida, la naturaleza es fuente de vida, para nosotros los indígenas por eso luchamos por las plantas y los animales por todo lo que la naturaleza nos ofrece porque siempre nos hemos caracterizado por sobrevivir al lado de ellos.”

B.B. Los inkas se caracterizaron por tener una cultura que respetaba la naturaleza, ellos explotaban en forma racional no la depredaban, ¿ustedes los matziguengas también continúan con esas practicas conservacionistas?

Creo que mira lo largo de la historia son mas de 500 años, yo creo que nuestra presencia en Machupicchu va significar mucho dadas las circunstancias, dado que mas de 500 años las luchas entre los inkas y los antis, hoy justamente juntos nuestra llegada es un reencuentro cultural después de tanto tiempo, momento histórico, reencuentro caracterizado por el intercambio de culturas, no éramos tan ajenos a los inkas, nosotros consideramos que hubo una similitud en la vivencia armoniosa, nosotros con la naturaleza. Sabemos muy bien que el gobierno por implementar con el decreto legislativo para favorecer a los transnacionales en el mundo, implementando ese decreto legislativo 1090 garantizará la tala ilegal de árboles en la selva peruana. Para poder cambiar lo que es el estado peruano lo que dice el biocombustible se ha declarado de necesidad y de priorización a nivel nacional. En ese entender nosotros hemos visto para decirle al gobierno: basta ya de atropellos!| nosotros sufrimos durante 500 años sin reconocimiento alguno han pasado de gobierno a gobierno y nunca nos han considerado humanos con derechos. Siempre han invitado a las trasnacionales a que vengan a la sociedad indígena.

B.B. A fin de conservar la naturaleza el Parlamento europeo ha decidido que únicamente importará aquellos árboles cortados legalmente y rechazará aquellos talados en forma ilícita.

P. K. Por calentamiento global la captación de bióxido de carbono y la emisión del anhídrido carbónico, la selva ahora es pulmón del mundo. En la selva nosotros vivimos muy felices, respiramos aire puro, pero con la presencia de las empresas extractivas nos han alterado la vivencia por eso nosotros estamos muy preocupados por nuestras raíces, lo vivimos. La misma naturaleza poco a poco va desaparecer. En la misma naturaleza las aves cantan diariamente con signos de tristeza porque hemos invadido su hábitat, su territorio donde ellos viven felices. Nosotros consideramos y estamos tan seguros; garantizar nuestra existencia humana como matziguengas, es justamente garantizar la estabilidad. Que el gobierno ampare según tenemos esas tierras, seguir teniéndolas como siempre.
Al pueblo de Machupicchu quiero dar este mensaje muy emocionado y sentido: Hermanos, la naturaleza es vida, es fuente vida, es armonía es paraíso por eso hermano de Machupicchu no destruyamos a los animales, a la selva, no destruyamos el medioambiente, dejemos que vivan con nosotros en armonía con todo el medioambiente. Quiero enviar un mensaje en matziguenga: […] Compañeros una vez mas sé que estas palabras que les envío desde el fondo de mi corazón y desde el corazón de la selva, tal vez pasarán, mañana. Pero, por qué pasará, porque nosotros estamos ya recontra cambiando de la idea que teníamos antes, hoy todo lo vemos negocio, es lo que ha cambiado nuestra vida, nuestra existencia. Eso caerá en saco roto, pero creo que esa generación que esta naciendo o que va nacer en el futuro va a ser el futuro de Machupicchu y de todo el mundo, pongámonos a pensar que después de muchos años, después de 500 años un nativo viene a reclamar sus justos derechos hasta llegar y luego darles este mensaje: Conservar la naturaleza de por vida por siglos para la humanidad, para que la humanidad este a salvo, para que nuestra humanidad siga existiendo.

B.B: la selva peruana posee una biodiversidad como pocos lugares en el mundo, por eso ofrece muchos recursos naturales

Nos preguntamos; ¿por qué las grandes potencias miran con gran celo nuestra flora y fauna?, justamente por eso, por su riqueza, su riqueza forestal y también la riqueza cultural de los pueblos indígenas, que yo personalmente me siento orgulloso de nuestra raza. No voy a parar, yo debo a mis ancestros.
No voy a parar hasta conseguir lo que debo para nuestro pueblo, no desconoceré lo que debo a mis antepasados.
Nuestra protesta es pacífica, nuestra intención, confieso, venimos a Machupicchu que ustedes deben atesorar para dar mensaje al Perú, al mundo. Tal vez mañana o pasado mañana nos estaremos retirando de Machupicchu. Lo que habíamos considerado imposible pero estamos ya en el Machupicchu, ya estamos en Machupicchu, es un hito histórico después de 500 años.
Pueblo en general, quiero indicar lo siguiente: ayer mientras realizábamos el paro pacifico, escuchaba con detenimiento algunas manifestaciones, si hubiéramos querido tomar Machupicchu no solo hubiéramos venido 250 personas sino 8 mil, quince mil, pero eso no era nuestra razón.
Tal vez hemos venido a incomodarles un poco, pero sabemos que a través de esta protesta el gobierno y todo el mundo nos escuchará. La [protesta por la] emisión de los decretos no solo defiende a planta y animales sino la defensa de nuestros derechos, que nos respeten como personas. Escuchaba que estamos en contra de las concesiones, privatizaciones, según lo que veo analizo eso queda solo en la palabras
Invoco vuestro espíritu combativo, no quedemos en papeles o palabras todo ello que se le lleva el viento sino actuemos con justa razón porque creo aparte de que Machupicchu sea del mundo es de ustedes es de nosotros y debemos ser los mas beneficiados con esto también quiero reiterar y agradecer a todas las personas que nos han apoyado que han sentido estos problemas, nuestros problemas, que no solo afecta a los nativos sino a toda la nación. A esas personas que asistieron con convicción, aquellas personas que no asistieron porque solo ven lo económico pueden estar hoy felices, seguro la generaciones de ustedes tendrán y pagarán el peso de vuestras conciencias
Aquellos que solo ven lo económico ahora están felices pero las generaciones de ustedes pagarán.
En nuestra sociedad la naturaleza se encargará de vuestras acciones, si favorecen o maltratan a la naturaleza con el tiempo los devolverá los favores o disfavores. Iimploro vivan cada uno sabiendo que tiene que defender lo suyo, estamos todos unidos en armonía aunque sea con un saludo cuando hayan tenido desavenencias.
Estamos en armonía si alguna ves hemos tenido intercambio de palabras con solo vuestra presencia se ha visto unidad del pueblo Matziguenga.
Sea una elección de unidad del pueblo por lograr que estamos por lograr, como no garantizar lo que es nuestro lo que ha sido y siempre sea nuestro, me despido de ustedes hasta a otra oportunidad si Dios lo permite hasta ese entonces…

Fotos:
(1)Recorrido de los Aborígenes selváticos por el pueblo de Machupicchu.



(2) Adquirido en contienda?... no!! Son recuerdos del encuentro con un grupo de Antisuyo.



(3)Después de algunas centurias se interrelacionaron andinos y antis.